Diario expuesto con agregados propios e impropios de vivencias y algún que otro nudo del pensamiento individual y espacial en Normandía.
viernes, 28 de agosto de 2015
Si el amanecer no fuera cierto
Si el amanecer no fuera cierto,
la noche sería reina
Y así las coronas empíreas
fulgirían este insano poema
cubiertas entre el cobijo
de sus silentes velos.
Y los astros reirían al fin
por el estruendo bruno
del secreto que se nos escapa.
Tempestad imprevista
Si pudiera ser
La tempestad imprevista
La lágrima ventura
de sueños de pétalos
danzantes en tus ojos
así, extraviados.
La tempestad imprevista
La lágrima ventura
de sueños de pétalos
danzantes en tus ojos
así, extraviados.
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